Paseando [Libre]

Hacía un poco de frío, pero nada de otro mundo... El viento movía la cola de la bufanda color café del rubio mientras caminaba sosteniendo con sus manos un total de tres correas. Los tonos de marrón cubrían su ropa siendo estas un pantalón del mencionado color, botas negras y un tapado hasta la rodilla de un tono más oscuro de marrón. Sus tres perros caminaban adelante de él, un Golden, un Pastor alemán y un doberman iban con orgullo y felicidad junto a su dueño.

Al llegar al parque liberó una a una las correas y les dejó sueltos en el área asignada para los perros y se sentó en un banco observandolos correr y jugar. Le agradaba esos momentos de tranquilidad lejos de las guerras y todo estrés.

Había escuchado ladridos, eso lo había sacado de sus pensamientos mientras caminaba por el parque que sabía Alemania frecuentaba (de hecho había ido a su casa y no encontrarlo, pensó en ir ahí).
"Ah.. espero que no me ataquen..." pensó tragando saliva y volteando a todos lados para ver si una jauría de perros furiosos y rabiosos come-italianos se venía sobre él. Pero no vio nada. Entonces comenzó a caminar más lentamente y sobresaltándose hasta por los trinidos de los pájaros.
Finalmente los vio, eran tres y estaban jugando, pero en vez de asustarse, sonrió y corrió hacia ellos. Los había reconocido.
-¡Alemania! -gritó llamando su atención- ¡Hola, hola!
Entonces se agachó y comenzó a acariciar al Golden, que era su favorito por el pelaje tan bonito que tenía.

Al ver a sus perros correr hacia alguien se alzó la mirada al mismo momento que escuchaba que alguien le llamaba, una voz muy conocida para él. Se levantó y se acercó donde este acariaba a uno de sus perros mientras los otros saltaban jugando alrededor.

- Hola Italia. - su voz era gruesa así como su tono tranquilo por la situación, al pararse al lado de él se agachó para acariciar también el perro - ¿Cómo estas? Creí que estarías con tu hermano en tu casa. - se podría decir que estaban de "vacaciones" así que esperaba que este estuviese con su familia. No lo admitiría, pero le agradó verlo allí.

Dejó de acariciar al Golden al escuchar la pregunta de Alemania y miró al suelo aún de rodillas.
-Ah... es que se fue con España niichan... -respondió quedamente, luego pareció darse cuenta de ello y sonrió tratando de disimular un poco la tristeza, pero era una sonrisa melancólica. La verdad es que casi nunca veía a su hermano, siempre estaban ocupados y en lugares separados ambos- Y pensé que podía venir a visitarte... ve~
Tomó una de las hojas secas que había en el pasto y la deshizo en sus manos. Traía puesta ropa de civil, nada de ese uniforme militar durante vacaciones. Un abrigo para el clima de Alemania que le parecía bastante más frío comparado con el suyo, unos jeans y zapatos deportivos.
-¿Te molesta mi visita? -preguntó levantando la vista y sonriendo más sinceramente, dejando de lado los pensamientos de hacía unos momentos.

Negó con la cabeza al instante - No, no me molesta. - el apuro de su respuesta le hizo suspirar reprimiendose a si mismo, no quería mostrarse débil o "sentimental" aunque estaba con su unico amigo, el único que venía a visitarle y le hacía sentirse feliz, incluso sus perros recibían con alegría al italiano.

Recordó cuando fue a hacer turismo a Italia, lo que había visitado y el lindo lugar y la gente amable. No sabía si Italia había recorrido Alemania, pues pese a estar gran parte del tiempo en su casa no lo veía salir demasiado más que al campo de entrenamiento y como mucho a algún parque o mercado. Así que se paró aún sujetando las correas de los perros en una mano - ¿Quieres ir a caminar? -

Asintió con la cabeza, se puso de pie de un salto y se colocó junto a Alemania. ¡Iba a pasear con él! Casi nunca había estado aquí, normalmente quien visitaba era Alemania, pero era bueno cambiar un poco las cosas de vez en cuando.
Saltó sobre un montoncito de hojas secas sólo para hacerlas crujir, era divertido, pero esperaba que Alemania no lo encontrara muy infantil, así que se volvió hacia él y le dedicó una sonrisa.
-¿Quiéres que te ayude? -le preguntó señalando a los perros- Se ve como mucho esfuerzo...
Si fuera él el dueño, jamás habría podido pasearlo a los tres al mismo tiempo.

Tras silvar para llamar a los perros observó la actitud infantil de Italia y como regresó a su lado. No aprobaba esa actitud en tiempo de guerra, pero en ese momento no lo consideró algo malo así que simplemente le sonrió - ¿Quieres pasear a alguno? - preguntó inclinandose para colocarle la correa a cada uno. Los miró e intercaló su mirada de uno en uno... cualquiera de ellos podría llevarse arrastrando al italiano si se cruzaba un gato o una perra en celo, o solo un auto.

Tras pensarlo unos instantes le pasó la correa del golden, no por que fuese el más obediente, ese era el pastor, si no por que era el que tenía más afinidad su aliado. - Sujetala fuerte, si tira tirale de regreso y no avances, imponete para que sepa que tu eres el jefe y no tendrás problemas. - esta vez habló con más brusquedad suavizando su vos al final al notar que imitaba el tono de los entrenamientos.

-E-esta bien... -dijo un poco nervioso y tragando saliva tomó la correa del golden con la mano. Se veía demasiado fuerte, supo que fácilmente podría arrastrarlo por todo el parque. O tal vez él era demasiado débil.
Bueno, las instrucciones sonaban sencillas. Sujétala fuerte, listo.
-Ve~ l-lindo perrito... -dijo, esperando que el perro saliera disparado en cualquier momento, pero eso no sucedió, sino que se quedó ahí moviendo levemente la cola y con la lengua de fuera.
-Mira, Alemania, lo estoy haciendo bien, ¿verdad? -dijo, mientras comenzaba a caminar, y al ver que el perro caminaba con él sin salir corriendo, perdió el miedo completamente. Se dio la vuelta dándole la espalda al golden para ver a Alemania, pero no se fijó en un detalle...
-¡Alemania! ¡Mir...! -comenzó a gritar, pero no logró terminar la frase al ser interrumpido por un aullido, al que tampoco pudo reaccionar porque inmediatamente se vio siendo arrastrado por el pasto. Le había pisado la cola.
Si tira tirale de regreso y no avances. Era la segunda instrucción, lo intentó, clavando los talones en el pasto pero el perro era demasiado fuerte.
-¡Waaaa! ¡Alemaniaaaaa! ¡Me llevaaaa! -gritó tratando de jalar con todas sus fuerzas al perro, pero cayendo de rodillas y siendo arrastrado por el suelo. Sí, él era demasiado débil- ¡Waaaah perrito detentee por favooor!

*Aparece de la nada una chica de cabellos morenos y ojos azules,con unas ropas un tanto oscuras pero sexies y saluda a esos dos chicos viendo esa lamentable escena,pero al ver a ese chico rubio esta se sonroja un poko ocultando su rostro*hola!*saluda con la mano y se queda parada frente a ellos*